Es frustrante descubrir que hay agua atrapada dentro de la puerta de tu coche, especialmente después de una lluvia intensa o un lavado. Este problema no sólo puede causar incomodidad, sino que también puede provocar corrosión y el mal olor. Afortunadamente, hay una solución relativamente sencilla para sacar el agua atrapada en las puertas de los vehículos: retirar los tapones inferiores.
¿Por qué se acumula agua en las puertas del coche?
La mayoría de los automóviles modernos están diseñados con canales de drenaje en las puertas para permitir que el agua fluya hacia el exterior. Sin embargo, con el tiempo, estos canales pueden obstruirse con suciedad, hojas u otros residuos, lo que impide que el agua salga correctamente y provoca la acumulación en el interior de las puertas.
Procedimiento paso a paso:
- Localiza los tapones inferiores: Inspecciona la parte inferior de la puerta para localizar los tapones de drenaje. La ubicación exacta puede variar según la marca y el modelo del vehículo, pero generalmente se encuentran cerca del borde inferior de la puerta y pueden estar protegidos por una cubierta de goma o plástico.
- Despeja el área: Antes de retirar los tapones, asegúrate de que el área sea apropiada para drenar el coche y si no es así, consigue un bote pequeño para evitar ensuciar el piso.
- Retira los tapones: Afloja y quitar los tapones de drenaje hasta que salgan completamente.
- Deja que el agua drene: Una vez que los tapones hayan sido retirados, el agua acumulada dentro de la puerta comenzará a drenar. Es probable que esta agua esté sucia, así que asegúrate de haber seguido el punto 2.
- Limpia los tapones: Mientras el agua drena, aprovecha la oportunidad para limpiar los tapones que retiraste. Lávalos con agua y jabón para eliminar la suciedad y asegurarte de que estén en buenas condiciones antes de volver a colocarlos.
- Vuelve a colocar los tapones: Una vez que el agua haya drenado por completo y los tapones estén limpios, vuelve a insertarlos en sus posiciones originales. Gíralos en sentido horario para asegurarte de que estén bien ajustados y evitar futuras filtraciones.
Al seguir estos simples pasos, podrás eliminar de manera efectiva el agua atrapada en las puertas de tu coche. Este procedimiento de mantenimiento preventivo ayudará a mantener tu vehículo en óptimas condiciones y evitará problemas a largo plazo, como la corrosión y la formación de moho.
Conclusión: